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LA ESCUSA

  • Hubo un tiempo en el que la tecnología no estaba tan avanzada, si querías escribir, escribías en una libreta con un boli bic, naranja o cristal dos escrituras a elegir, para entonces había una escusa muy buena y muy arraigada a la cultura  popular entre los alumnos cuando el profesor les pedía explicaciones del porque no habían realizado la tarea asignada , y era la de .... es que el perro se me ha comido los deberes.

 

  • Pero ahora, ahora los tiempos han cambiado muchacho. Vivimos en la era de la tecnología, de la digitalización, ya no vale esa escusa. Esa tradición tan bonita y tan nuestra que pasó de generación a generación, de padres a hijos ha quedado obsoleta.

 

  • Hoy en día escribimos con nuestros ordenadores, o dispositivos táctiles, con una amalgama de tipografías y estilos cuasi infinita, y con correctores automáticos que te corrigen. Aun así , hoy en día cometemos mas faltas que antaño.

 

  • Tenía que entregar un relato, y aunque parezca una versión mejorada de la escusa tradicional por antonomasia, mi perro ...... es verídico, tanto o más que las películas de los sábados por las tardes en Telecinco.

 

  • Yo había salido a comprar, lo típico y esencial para la supervivencia alimentaria y existencial de un ser del hoy, un ser que mira al futuro con optimismo diciendo al mañana ven , ven que voy a estar preparado.

 

  • Compré unas pizzas congeladas, un pack de 6 Frigopies, un paquete de Ruflex al jamón y la reedición remasterizada en Bluray con 2 discos repletos de extras de Mari Cármen y sus muñecos.

 

  • Aprovechando mi ausencia, mi perro accedió al ordenador acertando la contraseña ultra secreta encryptada de máxima seguridad que constaba  de 60 caracteres, la cual intercalaba mayúsculas, símbolos y números; teniendo así acceso total a todos los archivos de mi ordenador. La contraseña la omito, porque si no dejaría de ser ultra secreta.

 

  • Se metió en la la carpeta mis documentos, descomprimiendo un zip en el que ponía, RELATO, le dio al botón derecho, seguidamente le dio a eliminar, le salió un mensaje en el cual formulaba la pregunta: ¿estás seguro de que desea mover este archivo a la papelera de reciclaje?entre las dos opciones le dio a la casilla de SI... se fue a la papelera de reciclaje y elimino por completo el archivo del sistema.

 

  • Llegue a casa, descargue las bolsas de la compra, y puse cada cosa en su lugar, soy un tío muy ordenao, los helados al frigorífico, y lo demás en el suelo a tiempo de ser utilizado.

 

  • Cuando de repente vi como una luz emergía de la habitación, lo cual me extrañó, ya que ese día aun no había encendido el personal computer, entrando en la habitación,  en la silla observe pelos de can y el sitio aun guardaba calor, no tarde en darme cuenta de que minutos antes de estar amagao en una esquina mirándome con la cabeza 15 grados girada en diagonal  mientras sacaba la lengua, el perro había estado ocupando mi lugar de trabajo, me temí lo peor .... y lo peor se confirmó.

 

  • En cuanto me di cuenta de lo ocurrido ,entré en cólera, se me puso el pelo de punta y amarillo, se me hincharon las venas, casi tanto que se podían ver los leucocitos fluyendo por mi torrente sanguíneo y un señor con barba blanca, como el de "Era se una vez", asignandoles ordenes. Empece a tirar espuma por la boca; vamos, que me enfadé muchísimo, pero el perro me miró con carusa, como si comprendiese todo lo que estaba sucediendo, me cucó el ojo y se me pasó el enfado enseguida. Me dije a mi mismo para mis adentros interiores, hay que ver que listo es el jodio.

 

 

  • Lo mejor de todo es que yo no tengo  perro, pero bueno, en esta vida llena de incertidumbres, llena de misterios, de  preguntas sin respuesta....¿quién soy yo para cuestionar los caprichos que me designa el destino? .

 

  • Si el destino está escrito, dejemos que sea el destino que se de la mano con mi capacidad creativa y sean los que escriban el relato llegado el momento de la entrega. Inventaré una escusa acorde a los tiempos que corren y seré el pionero de los tiempos venideros, pasando a formar parte así, de un nuevo legado en el éter del imaginario colectivo.



J.FRAMES BOND

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